La Catedral del Cusco: Historia y Arquitectura

La Catedral del Cusco. Esta magnífica estructura no solo es un lugar de culto, sino también un símbolo del encuentro entre dos mundos: el Imperio Inca y la colonización española. Su majestuosa fachada y su rica historia están llenas de misterio y detalles que cautivan a cada visitante. ¿Te gustaría descubrir los secretos que esconde este monumento histórico? Acompáñanos en este recorrido donde exploraremos la historia y la arquitectura de la Catedral del Cusco.

Origen e Historia de la Catedral del Cusco

La construcción de la Catedral del Cusco se remonta a la época de la colonización española, cuando el Cusco era una ciudad clave para el Virreinato del Perú. Antes de ser catedral, el sitio donde hoy se erige fue Suntur Wasi conocido también por el antiguo palacio de Viracocha Inca, un importante emperador inca. Con la llegada de los españoles, se decidió construir una catedral que representara el dominio español y el poder de la Iglesia Católica sobre los habitantes locales.

Un Proceso de Construcción Largo y Complejo

La construcción de la catedral fue un proceso largo y complicado, tomó más de un siglo entre 1560 y 1640. La catedral fue diseñada con un estilo renacentista con influencias góticas y barrocas, y los trabajadores utilizaron las técnicas que habían aprendido de los incas, combinando lo mejor de ambas culturas.

¿Sabías que? Muchas de las piedras utilizadas para la construcción provienen de Sacsayhuamán, una fortaleza inca cercana, lo que refleja la influencia indígena en esta imponente obra colonial.

Un Símbolo de Poder Religioso

La Catedral del Cusco no solo es importante desde un punto de vista arquitectónico, sino que también simboliza el poder religioso que la Iglesia Católica ejerció sobre el nuevo territorio conquistado. Fue construida para ser el principal centro religioso de la ciudad, y hoy en día sigue siendo un lugar de gran importancia para los cusqueños.

Arquitectura de la Catedral del Cusco

La Catedral del Cusco es una obra maestra arquitectónica que combina diferentes estilos, lo que la convierte en un monumento fascinante para explorar. Veamos algunos de sus detalles arquitectónicos más destacados.

Fachada Imponente y Estilo Renacentista

Cuando te acercas a la catedral, lo primero que llama la atención es su fachada imponente. Construida principalmente en piedra andesita gris, la fachada sigue un estilo renacentista clásico, con sus columnas y arcos que reflejan el arte europeo. Sin embargo, si observas con atención, verás algunos detalles que recuerdan la influencia inca.

El diseño incluye dos torres gemelas (campanarios) y tres grandes portones, decorados con detalles que realzan la solemnidad del edificio. A lo largo de la fachada también podemos ver símbolos religiosos como cruces, escudos y elementos florales que representan la riqueza de la iglesia.

Interior: Estilo Barroco Cargado de Detalles

Al entrar a la catedral, te sumerges en un mundo de arte barroco, con detalles recargados que reflejan la magnificencia de la Iglesia Católica en la época colonial. Los altares, recubiertos de oro y decorados con esculturas de santos, son uno de los principales atractivos del interior.

Uno de los elementos más impresionantes es el altar mayor, elaborado en plata y que representa la riqueza y poder de la Iglesia en esa época. La ornamentación en el interior es rica en símbolos católicos, pero también incorpora algunos detalles que nos recuerdan la presencia inca, como los querubines con rasgos andinos.

 El Coro Tallado en Madera

Otro de los tesoros de la catedral es su coro tallado en madera, que es considerado una de las mejores muestras de arte colonial en Sudamérica. Cada uno de los asientos del coro está finamente decorado con figuras religiosas y motivos florales.

Capillas Laterales y Retablos

La Catedral del Cusco también cuenta con varias capillas laterales, cada una con su propio retablo decorado con imágenes religiosas y elementos dorados. Destacan la Capilla de la Virgen de los Remedios y la Capilla del Señor de los Temblores, el santo patrón de Cusco.

Arte Colonial en la Catedral del Cusco

La Catedral del Cusco alberga una colección extraordinaria de pinturas y esculturas, muchas de las cuales provienen de la famosa Escuela Cusqueña de Arte, que floreció en el siglo XVII. Esta escuela fusionó elementos europeos con técnicas y estilos indígenas, lo que dio lugar a obras únicas en su tipo.

El Señor de los Temblores

Una de las figuras más veneradas en Cusco se encuentra dentro de la catedral, es el Señor de los Temblores, una figura de Cristo crucificado que tiene una profunda conexión con la historia sísmica de la ciudad. Se dice que, en 1650, cuando un terremoto sacudió Cusco, esta imagen fue llevada en procesión y, milagrosamente, el terremoto cesó. Desde entonces, es considerado el protector de Cusco y cada año durante la Semana Santa, se celebra una procesión en su honor.

Pinturas de la Escuela Cusqueña

La Escuela Cusqueña surgió en el siglo XVII y se destacó por su estilo único, que combinaba las técnicas europeas de pintura con detalles iconográficos de la cultura andina. En la catedral se pueden admirar varias obras de esta escuela, muchas de las cuales representan escenas religiosas, pero con un toque local.

La Última Cena con un cuy

Una de las pinturas más curiosas de la catedral es la representación de la Última Cena, realizada por el pintor Marcos Zapata. Lo que hace especial a esta obra es que, en lugar de los tradicionales panes y vinos, se presenta a Jesús y sus discípulos compartiendo un cuy, un plato típico andino. Este detalle resalta cómo los artistas locales reinterpretaron temas religiosos europeos con elementos de su propia cultura.

Templos Aledaños a la Catedral

En la actualidad, el conjunto arquitectónico está compuesto por tres templos. A la izquierda de la fachada se encuentra la iglesia de la Sagrada Familia, en el centro está la Basílica de la Catedral, y a la derecha, la iglesia del Triunfo.

El Templo de El Triunfo

Fue construida en 1539, sirvió provisionalmente como la Catedral de la ciudad. En esta primera construcción, fray Vicente Valverde colocó la cruz que había traído desde España y que es conocida como Cruz de la Conquista manteniéndose en el mismo lugar correspondiente al altar mayor de este templo.

En la cara principal se colocó la imagen de Nuestra Señora de la Asunción en memoria a la victoria de los españoles sobre Manco Inca en 1536 de donde viene la denominación de “El Triunfo”.

Esta obra junto con sus muros de protección y sus tres puertas concluyen en 1664. Fue construida con piedra andesita, el templo es formado por tres naves: de la epístola, del evangelio y la nave central, precisamente se ingresa de la Catedral a la Iglesia del Triunfo por el sotocoro de la iglesia.

El Templo de la Sagrada Familia

El 13 de septiembre de 1723 se colocó la primera piedra para iniciar la construcción del Templo de la Sagrada Familia conocido también como conocida como la iglesia de Jesús María y José, por encargo del obispo Gabriel de Arregui. Tras la muerte del arquitecto encargado de la obra, se reinicia en 1733 y fue concluida el 3 de septiembre de 1735.

En 1996 con el apoyo del Arzobispado del Cuzco y la Unión Europea, el Templo es restaurado íntegramente que por su mal estado de conservación estuvo cerrado cerca de 30 años.

El templo está compuesto por una nave en cruz latina de planta rectangular con pequeñas hornacinas laterales. Los muros al interior del templo son de piedra pulida con enlucido de cal. Toda la iglesia está construida también con andesita.

El Papel de la Catedral en la Cultura Cusqueña

La Catedral del Cusco no es solo un monumento histórico y artístico, sino también un lugar de gran importancia para la cultura y religión de la ciudad. A lo largo de los siglos, ha sido testigo de importantes eventos religiosos y culturales que han moldeado la identidad de Cusco.

Procesiones y Festividades

La catedral es el centro de varias celebraciones religiosas a lo largo del año. Durante la Semana Santa, la imagen del Señor de los Temblores es sacada en procesión por las calles de la ciudad, atrayendo a miles de fieles. Otras festividades importantes incluyen la festividad del Corpus Christi, de donde sale la carrosa y la procesión de los 15 santos y vírgenes, donde la catedral juega un papel central en las procesiones y celebraciones.

La Catedral del Cusco como Patrimonio de la Humanidad

La importancia histórica y cultural de la Catedral del Cusco fue reconocida en 1983, cuando fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Este reconocimiento refuerza el valor de la catedral no solo como un símbolo de la religión, sino también como un testimonio de la rica historia de Cusco y su papel en la historia del Perú.

HORARIO Y PRECIOS

Para ingresar a la Basílica Catedral de Cusco el precio general es PEN 25 y Precio estudiante es de PEN 12.50, de lunes a domingo de 10:00 a 18:00 horas.

La Catedral del Cusco es un testimonio viviente de la historia, la arquitectura y el arte que surgieron de la fusión entre las culturas inca y española. Desde su imponente fachada hasta su interior lleno de tesoros artísticos, la catedral sigue siendo uno de los lugares más importantes y fascinantes de Cusco.
Si estás planeando visitar Cusco, no puedes dejar de incluir la Catedral del Cusco en tu itinerario. No solo te maravillará su arquitectura y arte, sino que también te sumergirás en la rica historia que esta catedral representa.